Aprende lo que significa que la información e industrias enteras se conviertan en vapor.
Hace unos cientos de años, los monjes de los monasterios medievales eran los principales guardianes de la sabiduría. Recogían cuidadosamente el conocimiento del mundo y lo transcribían y conservaban para el futuro.
Pero con la invención de la ciencia y la tecnología, los monjes se convirtieron en guardianes de la sabiduría.
Pero con la invención de la imprenta, sus esfuerzos quedaron obsoletos. Y ahora, en la era de Internet y la tecnología digital, los libros impresos están en el mismo barco en el que antes estaban los monjes. En una palabra, la información -que antes era una masa inerte, contenida en las páginas de los libros- se ha convertido en vapor.
Pero no sólo la información se ha vaporizado. Varias cosas físicas -y con ellas industrias enteras- han empezado a desvanecerse en el aire.
Este resumen explica cómo será una economía en estado gaseoso. Te dicen qué va de la mano de la vaporización de la información y de la economía, qué oportunidades y riesgos conlleva una economía vaporizada y cómo prepararse mejor para ello.
En este resumen, aprenderás
- acerca de los tres estados químicos de la información;
- cómo los gigantes de Internet como Google y Facebook crean valor en un mundo vaporizado;y
- lo que la vaporización de nuestra economía significa para el trabajo humano.
La información puede existir en tres estados diferentes: sólido, líquido y vapor.
Con todos nuestros prácticos dispositivos conectados a Internet, es fácil entender por qué hoy se llama “la era de la información”. Menos fácil de entender es cómo se comporta esta información.
Es útil pensar en la información como en el agua u otros elementos químicos, ya que puede existir en distintos estados dependiendo de cómo queramos utilizarla.
Para empezar, la información puede estar en un estado sólido, como en un libro o en un CD. El inconveniente de tener la información en estado sólido es que es difícil compartirla con más de una persona.
Pero vender la información en estado sólido no es lo mismo.
Pero vender información en formato físico es una forma cómoda de monetizarla, que es otra razón por la que, históricamente, se ha preferido mantener la información en estado sólido.
Por otra parte, la venta de información en formato físico es una forma cómoda de monetizarla.
Notablemente, la forma en que intercambiamos información no cambió mucho entre 1455 (cuando Johannes Gutenberg inventó la imprenta) y la reciente aparición de Internet. A lo largo de este periodo, la información siempre se almacenó en estado sólido, ya fuera en forma de libros, CD o DVD.
Aunque estos estados físicos son formas duraderas y duraderas de almacenar información, también exigen mucho dinero y energía para producirlos y distribuirlos. Además, ocupan mucho espacio de almacenamiento y sólo pueden compartirse entre una persona y otra. Además, los discos láser se quedan obsoletos rápidamente.
Así que cuando surgió Internet, la gente no dudó en liberar la información de sus limitaciones físicas y transformarla en un estado más líquido.
Imagina un cubito de hielo que empieza a derretirse; la información, parecida al agua, era ahora mucho más fácil de extender por una gran superficie. Con el clic de un ratón, era sencillo publicar, editar y compartir instantáneamente un archivo con todo el mundo.
Pero aún se avecinaba otro cambio de estado. A medida que la información pasaba de los ordenadores de sobremesa a los teléfonos inteligentes, se convertía en algo así como un vapor: de movimiento rápido, libre y en constante cambio.
Así es como estamos ahora. Con Internet de alta velocidad en nuestros bolsillos, la información ya no está atada a tu oficina, ni siquiera a tu portátil. Se mueve a tu alrededor, como los gases atmosféricos.
No importa dónde o quién seas, ya seas un científico en un laboratorio o un monje en un monasterio en la cima de una montaña, hoy en día aprender cualquier cosa, en cualquier momento, está a un par de toques de distancia.
El software puede vaporizar empresas, objetos físicos e industrias enteras con equivalentes digitales.
Hoy en día, alrededor del 84 por ciento del valor de una empresa típica reside en intangibles como procesos, datos y conexiones.
Una de las mayores ventajas de las tecnologías actuales basadas en software es que nos permiten hacer más con menos recursos.
El software nos ayuda a controlar, gestionar y controlar la información.
Nos ayudan a controlar y analizar las funciones al tiempo que nos proporcionan nueva información y conocimientos que nos permiten hacer mejores diseños. Por ejemplo, los coches actuales pueden recopilar datos sobre su propio rendimiento, y estos datos ayudan a las empresas automovilísticas a producir modelos más eficientes que contaminan menos.
El software puede incluso ayudarnos a hacer más cosas con menos recursos.
El software puede utilizarse incluso para sustituir a servicios públicos importantes, como las redes de telecomunicaciones que gestionan el tráfico de miles de personas hablando y enviando mensajes.
Con el avanzado software actual, podríamos deshacernos de todos los postes y cables telefónicos, y sustituirlos por una red eficiente basada en Internet que dirigiera las llamadas mejor y de forma más fiable que antes.
Muchos de los bienes físicos de nuestra vida cotidiana también podrían ser sustituidos por software, junto con todos esos viejos CD y DVD.
Es sólo cuestión de tiempo. La vaporización lo abarcará todo, desde trabajos y tiendas individuales hasta empresas e industrias enteras. Todo lo que pueda vaporizarse y sustituirse por software se vaporizará.
De hecho, este proceso ya ha comenzado, y la industria musical es un buen ejemplo. Las grandes tiendas de discos han sido sustituidas por servicios en línea como la tienda iTunes y Amazon. En lugar de tener que lidiar con selecciones físicas limitadas y hacer cola en una tienda, ahora cualquiera con una conexión a Internet tiene acceso a una gran cantidad de música digital.
Y cuando se sustituyan estas tiendas de discos, también se vaporizará toda la experiencia del consumidor y la cadena de suministro. La industria que produce el embalaje de los CD también desaparecerá, al igual que los almacenes que guardaban las existencias de CD. Y el mismo destino aguarda a las industrias que fabrican productos secundarios como los reproductores de CD. Todas ellas se habrán vuelto redundantes gracias al software.
Las empresas online crean ecosistemas donde se imponen sus propias y vagas reglas.
Los gigantes de Internet como eBay, Amazon, Google y Snapchat no tropezaron con la popularidad.
Los gigantes de Internet como eBay, Amazon, Google y Snapchat no tropezaron con la popularidad.
Cada empresa sabía cómo conectar a las personas adecuadas entre sí, algo así como las operadoras de una centralita telefónica antigua.
Para Amazon y eBay, las “personas adecuadas” eran obvias: estas plataformas querían conectar a compradores con vendedores. Pero la misma estrategia es válida para otros gigantes de Internet.
Google ha hecho una fortuna conectando a quienes buscan información con quienes tienen la información que buscan. YouTube conecta a los productores de vídeo con los espectadores. Y las aplicaciones sociales como Snapchat son meros facilitadores para la gente corriente que quiere estar conectada entre sí.
Pero a medida que cada una de estas empresas crecía, su ecosistema de conexiones se volvía más complejo a medida que se unían usuarios diferentes e inesperados.
Por ejemplo, las aplicaciones sociales de Apple y de Snapchat.
Por ejemplo, la App Store de Apple. Lo que empezó como un lugar para que los desarrolladores vendieran aplicaciones útiles, pronto se transformó en un mercado altamente competitivo, en el que los desarrolladores contrataban a empresas para aumentar sus ventas.
Estas plataformas no son más que un conjunto de empresas que se dedican a la venta de aplicaciones.
Estas plataformas no son el tipo de espacios públicos donde la gente puede ejercer la libertad de expresión. El propietario de la plataforma puede inventar normas arbitrarias -bien explicadas o no- que luego puede hacer cumplir, lo que da a los usuarios dos opciones: cumplirlas completamente o no participar en absoluto
Apple dice que así se asegura de que las aplicaciones que se venden en la App Store cumplen sus normas sobre lo que es aceptable
Sin embargo, a menudo dan razones vagas, como que una aplicación es “espeluznante”, “censurable” o “se pasa de la raya” para explicar un rechazo. Y aunque las aplicaciones pedorras son expulsadas de forma rutinaria, puedes encontrar, por ejemplo, una aplicación de “Póquer Sexy” en su tienda.
También hay que tener en cuenta que Apple recibe el 30 por ciento de cada compra en la App Store, pero que el sistema para determinar la clasificación de una aplicación, que desempeña un papel muy importante en las posibilidades de éxito de una aplicación, también es extremadamente impreciso.
Esto ha dado lugar a que la mayoría de las aplicaciones de la App Store sean rechazadas.
Esto ha dado lugar a rumores de que se pueden utilizar pagos secretos, sobornos, regalos y otros métodos dudosos para aumentar la clasificación de una aplicación en la tienda.
Las plataformas online de éxito se esfuerzan por mantener y monetizar a sus usuarios.
“La vigilancia es el modelo de negocio de Internet”
El establecimiento de normas no es sólo una forma de que las empresas de Internet controlen el comportamiento de los usuarios, sino que también puede ayudar a garantizar que éstos permanezcan fieles y vuelvan a la plataforma.
Eso puede ser difícil de conseguir.
Esto puede ser difícil en una economía vaporosa, ya que los usuarios tienden a gravitar hacia cualquier plataforma que sea la más grande. Así que veamos algunos métodos diferentes que utilizan las empresas para vincular a las personas a una plataforma y hacerlas más activas, todo ello mientras generan más beneficios en el proceso.
Una de las formas más comunes de retener a los usuarios es crear herramientas únicas que les permitan generar sus propios contenidos.
Los usuarios de las plataformas de Internet son los más activos.
Ya se trate de publicar fotos o vídeos, o simplemente de crear hilos de conversación, estas herramientas fomentan el compromiso y evitan que los usuarios se vayan, porque, si se van, pierden el acceso a todo su contenido. Esta es la razón por la que Apple y Google ofrecen herramientas gratuitas de creación de contenidos en forma de iMovie y YouTube.
Otra forma eficaz de fidelizar a los usuarios es facilitarles la búsqueda de contenidos y luego compartirlos y charlar sobre ellos. Facebook y otras empresas de medios sociales prosperan con esta dinámica.
También es habitual que las plataformas de éxito ofrezcan funciones de almacenamiento y reproducción a sus usuarios.
Sin estas funciones, los propietarios de las plataformas corren el riesgo de que los usuarios encuentren la forma de llevarse su contenido a otra parte. Esta es la razón por la que Google tiene toda una línea de hardware como el Chromebook y el Nexus, así como funciones como el Chromecast. También es la razón por la que Apple proporciona contenidos que sólo son compatibles con sus propios productos.
Proporcionar contenidos también puede conducir a la monetización cuando una plataforma establece su propio mercado de contenidos, donde los propietarios pueden llevarse una parte de cada transacción, como en la iTunes Store.
Pero otro método popular es el de la monetización.
Pero otro método popular utilizado por muchas plataformas es conseguir que los usuarios rellenen perfiles elaborados, tras lo cual pueden vender estos datos detallados de los usuarios a empresas de marketing.
La Internet de las cosas seguirá aumentando la cantidad y el valor de los datos.
“Nuestros aparatos están a punto de despertar”
La economía vaporizada ha ofrecido a las empresas una variedad de formas de ganar dinero, la mayoría de las cuales implican convertir los datos en grandes cantidades.
El hecho de que la gente esté constantemente conectada a Internet produce cantidades ingentes de datos, y esta cantidad va a seguir creciendo.
Para 2020, se calcula que cada persona producirá la alucinante cantidad de 1,7 megabits de datos por segundo.
Esto se deberá a que las personas se conectan constantemente a Internet.
Esto se deberá a la Internet de las cosas, donde objetos cotidianos, como tu frigorífico y tu lavadora, estarán conectados a Internet y recopilando datos.
Hoy en día, a la mayoría de nosotros todavía nos gusta pensar que hay algún momento del día en el que estamos desconectados. Pero, dentro de poco, todos estaremos permanentemente conectados y produciendo datos continuamente.
Cuando esto ocurra, las empresas de macrodatos extraerán la información procedente de estos aparatos y controlarán y mejorarán las mediciones.
Por ejemplo, un barril de cerveza. La empresa estadounidense SteadyServ tiene un sensor que se coloca en el fondo del barril y transmite los datos a un servidor para que los restaurantes y bares puedan gestionar sus existencias en tiempo real. Así, cuando un barril esté casi vacío, puede activarse una alerta para su reposición. Pero, lo que es más importante, las empresas también podrán seguir de cerca las ventas de los distintos bares en tiempo real para conocer mejor las tendencias locales, estatales o nacionales.
Las empresas tradicionales están empezando a utilizar el barril de cerveza.
Las empresas tradicionales también están dando cada vez más valor a los datos, pero tienen dificultades con el enorme volumen de todos ellos. El reto reside en cómo archivar, clasificar, buscar y analizar eficazmente los datos en busca de información útil, todo ello manteniéndolos fuera del alcance de piratas informáticos malintencionados.
Sin embargo, para superar este reto, es necesario contar con un sistema de gestión de datos eficaz.
Pero superar este reto abrirá muchas oportunidades de negocio en el futuro.
Los nuevos modelos de negocio están eludiendo los conceptos tradicionales de propiedad e intermediarios.
Antaño, una empresa podía valorarse con precisión haciendo un inventario de sus activos físicos. Pero esto no se aplica a empresas como Airbnb y Uber, que no tienen habitaciones ni coches propios.
Entonces, ¿cómo se valora Airbnb en 30.000 millones de dólares y Uber en 66.000 millones?
Crean un mercado de igual a igual mediante un software que actúa como intermediario entre sus clientes, que son los propietarios de los apartamentos y coches, y sus usuarios, que quieren utilizar temporalmente esa propiedad.
Este modelo también se conoce como “modelo de alquiler”.
Este modelo también se conoce como “acceso en lugar de propiedad” y parte del éxito de la plataforma se debe a su naturaleza colaborativa, poniendo en contacto, por ejemplo, a usuarios que buscan alojamiento con quienes ya poseen apartamentos que pueden alquilar. Además, ambas partes pueden elegir si quieren o no hacer negocios con la otra basándose en las valoraciones de transacciones anteriores.
Y la innovadora tecnología blockchain promete llevar este modelo al siguiente nivel, eliminando aún más intermediarios.
La tecnología blockchain se basa en los principios de la criptografía para permitir transacciones comerciales entre dos partes sin ningún tipo de supervisión empresarial o bancaria y, por tanto, sin comisiones asociadas.
La tecnología blockchain se basa en los principios de la criptografía para permitir transacciones comerciales entre dos partes sin ningún tipo de supervisión empresarial o bancaria y, por tanto, sin comisiones asociadas.
Ya se está utilizando para Bitcoin, la moneda electrónica.
Las plataformas de pago que funcionan con blockchain pueden ser completamente independientes de los bancos y las empresas de tarjetas de crédito, que se llevan grandes porcentajes de las transacciones y venden los datos de los usuarios con fines dudosos. Una versión “blockchain” de Airbnb, por ejemplo, podría permitir a usuarios y propietarios ahorrar dinero.
Otro ejemplo de servicio racionalizado es el crowdfunding, que está facilitando a los empresarios la búsqueda de financiación.
El crowdfunding elude el lento y tradicional proceso de captación de fondos de los inversores, eliminando el papeleo y las interminables entrevistas. Pone el poder en manos de los individuos para llegar a través de una plataforma de software, atraer a los inversores mediante incentivos e incluso integrar los comentarios durante el proceso de desarrollo.
Para ayudar a los trabajadores desplazados, necesitamos reformar el sistema educativo de EE.UU.
En el resumen anterior se ha descrito la vaporización de servicios, productos físicos e incluso industrias enteras. Así que es muy posible que te preguntes: “¿Cuántos puestos de trabajo va a quitar esto?”
Es cierto.
Es cierto que, junto con la vaporización del trabajo humano, los robots automatizados ya son capaces de sustituir varias tareas humanas.
En el Hotel Henn-na de Nagasaki (Japón), diez robots son capaces de mantener el hotel realizando diversas funciones, como transportar el equipaje, cambiar las sábanas de las camas y limpiar las habitaciones.
No son precisamente trabajos deseables, pero otros campos como el periodismo, la medicina, el derecho y la contabilidad también están ya amenazados de automatización.
De hecho, un informe de Oxford de 2011 estimaba que el 47% de todos los empleos de EE.UU. podrían automatizarse pronto.
Puede que esto no sean del todo malas noticias. Hay optimistas que ven en la automatización una oportunidad para elevar el nivel de vida de todos y ampliar las libertades personales. Pero también están los que creen que la automatización dejará en paro permanente a una gran parte de la sociedad.
La cuestión importante es si la automatización destruirá o no más puestos de trabajo de los que pueden crear las nuevas formas de empresa. Por desgracia, es demasiado pronto para saberlo.
Pero lo que sí sabemos con certeza es que nuestro sistema educativo no está preparado para afrontar el reto de reeducar y formar a millones de trabajadores desplazados. Nunca se diseñó para educar a una mano de obra y enseñar habilidades profesionales, sino para enseñar a los estudiantes ideas abstractas.
En una economía vaporizada, el sistema educativo debe adaptarse para que los seres humanos realicen las tareas que los ordenadores no pueden llevar a cabo, como mantener discusiones con los estudiantes, debatir y aplicar los conocimientos de formas novedosas para resolver ideas.
Aunque no podamos evitar la pérdida de puestos de trabajo, podemos asegurarnos de que estamos listos y preparados para lo que nos espera.
Conclusiones
El mensaje clave de este libro:
Gracias a la llegada de Internet, cada vez más información se está vaporizando, es decir, separándose de los objetos tangibles y entrando en la nube. Aprovechando la información de nuestro entorno e introduciéndola en el software, podremos hacer cada vez más cosas con cada vez menos recursos. Hoy en día, los datos que genera y recopila una empresa son su principal activo. Y el éxito de las generaciones futuras puede depender de su capacidad para realizar trabajos que no pueden automatizarse.
Consejos Accionables:
Cuidado con los datos
Sé consciente del papel que desempeñas en Internet.
Cada cosa que haces en una tienda virtual es rastreada. Cada oferta que observas y a la que respondes se procesa y se utiliza para construir un perfil tuyo. Así que piénsate dos veces si realmente necesitas un perfil en ese sitio de compras y si estás de acuerdo con los derechos de acceso de esa aplicación que acabas de descargarte.
Tienes un perfil de ti mismo.
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