Las empresas necesitan normalizar una rotación saludable
Una cultura que acepta el cambio puede crear nuevas oportunidades para los empleados y las organizaciones.
Una cultura que acepta el cambio puede crear nuevas oportunidades para los empleados y las organizaciones.
Por Más del 70% de Fortuna 500 empresas ofrecen algún tipo de tutoría a sus empleados, con la esperanza de
«Renunciar Silenciosamente» es un nuevo nombre para un comportamiento antiguo. Los autores, que han realizado evaluaciones de liderazgo de 360 grados durante décadas, han pedido con regularidad a la gente que califique si su «entorno de trabajo es un lugar en el que la gente quiere hacer un esfuerzo adicional».
Resumen.
Durante la pandemia, muchos de nosotros quedamos más aislados que antes. La comunidad, que los autores definen como un grupo de personas que comparten una preocupación mutua por el bienestar de los demás, ha demostrado ser un desafío de cultivar, especialmente para los que trabajan virtualmente. Para obtener más información, realizaron una encuesta con la Conferencia para la Mujer en la que preguntaron a casi 1.500 participantes sobre su sentido de comunidad en el trabajo antes y después de la pandemia y descubrieron que había disminuido un 37%. Cuando la gente tenía un sentido de comunidad en el trabajo, descubrieron que tenían un 58% más de probabilidades de prosperar en el trabajo, un 55% más de participación y un 66% más de probabilidades de permanecer en su organización. Experimentaron mucho menos estrés y también eran mucho más propensos a prosperar fuera del trabajo. La gente puede crear una comunidad de muchas maneras y las preferencias pueden diferir según sus antecedentes e intereses. Los autores presentan varias formas en que las empresas han construido con éxito un sentido de comunidad en el trabajo que los líderes pueden considerar emular en sus propias organizaciones.
Resumen.
Los empleados de hoy están hartos. La gente está ansiosa por algo mejor (y, a veces, simplemente nuevo). Quieren que los vean, los valoren y los escuchen. Quieren equidad, dignidad, seguridad, equilibrio, flexibilidad y autonomía. Esperan oportunidades de crecimiento, aprendizaje, contribuciones significativas y realización. Puede que suene mucho, pero si nos esforzamos por ayudarlos a alcanzar su máximo potencial y dejar el mundo en un lugar mejor, es bastante modesto. Sin embargo, para las organizaciones y los RRHH, navegar por este panorama es complicado. Las empresas buscan ganar la «guerra por el talento», pero casi todos los aspectos del campo de batalla han cambiado. Muchas personas ya no se interesan ni se inspiran en escalar una carrera profesional que otra persona construyó. En este contexto, hay una solución que alinea las prioridades individuales y organizacionales, los objetivos estratégicos y las metas de autorrealización, y un presente incierto con un futuro aún más incierto. Es hora de cambiar la forma en que pensamos sobre la forma de una carrera, ya no es una escalera, sino una cartera que curar. A continuación, le indicamos cómo empezar a habilitar y fomentar las carteras de carreras dentro de su organización.
En lugar de tratar de predecir las habilidades del futuro, los líderes deben abarcar una mentalidad más flexible.
Comience por recalibrar las expectativas.
A medida que más y más compañías se comprometen a invertir en diversidad, equidad e inclusión, los empleados negros aún informan que se sienten aislados, incapaces de ser auténticos y luchando con la confianza.
En la frenética necesidad de contratar para posiciones abiertas, puede ser fácil olvidarse de las personas que se quedan.
Abordar la situación de curiosidad, no culpar.
Aquí está cómo diseñar un programa de desarrollo que funciona.
Tres tendencias, y cómo prepararse para ellos.
Sus procesos pueden estar socavando sus intentos de construir una cultura de alto rendimiento.
El análisis de las comunicaciones digitales puede ayudarlo a identificar qué personas son altos intérpretes y qué roles se están volviendo obsoletos.
La crisis está reenviando la fuerza laboral.
Cómo probar el futuro a su personal, especialmente en tiempos inciertos.
Una guía basada en la investigación para convertir un callejón sin salida en un camino hacia adelante.
Cuando las cosas salen mal, la gente a menudo se apaga y se desconecta.
¿Con qué frecuencia ves tu trabajo como una vía para convertirte en tu mejor yo moral? Proponemos que a través de elaboración de trabajos—reimaginando, redefiniendo y rediseñando activamente tu propio trabajo— tu lugar de trabajo puede convertirse en un laboratorio moral para el desarrollo del carácter. Aunque casi todas las personas quieren verse a sí mismas como seres humanos buenos y morales, un estudio reciente sugiere que muchos de nosotros no priorizamos la moralidad en nuestro desarrollo personal. En primer lugar, y lo más importante, use elaboración cognitiva para cambiar fundamentalmente la forma en que aborda su trabajo, reconociendo que el trabajo es una vía para el desarrollo del carácter. En segundo lugar, participar en creación de tareas para dar forma a sus actividades diarias de una manera que evite desafíos éticos y le brinde la oportunidad de ser una influencia para el bien. Por último, emplee creación relacional para construir una sólida red de amigos, colegas y mentores en el trabajo que apoyen sus esfuerzos para estar a la altura de sus valores.